domingo, 30 de agosto de 2015

Gra de Fajol y Bastiments

Rebeco, fácilmente visibles en la zona.
El valle de Ulldeter en Girona, en el término de la localidad pirenaica de Setcases, es el lugar de nacimiento del río Ter. Forma parte del parque de las Capçaleres del Ter i Freser. El valle está rodeado por cimas accesibles y fáciles de recorrer en su mayoría, algunas de ellas cercanas a los 3.000 metros. Es el caso de Gra de Fajol, 2714 mts, y Bastiments, 2.881 mts. Su cercanía a Barcelona y la autovía que lleva hasta Ripoll no requiere de grandes planes ni preparativos para acercarse a hacer alguna excursión de una jornada en cualquier época del año. Incluso para esquiar en sus pistas y recorrer los alrededores con raquetas, crampones o realizar travesías con esquís de montaña.

El Canigó al fondo
Tras volver de la Porta del Cel decido, después de un día de descanso, acercarme a Vallter para coronar de nuevo alguna de las cimas. La Coma de l'Orri es un valle que aunque conocido es menos visitado que el de Vallter, justo al otro lado de las Crestes del Gra de Fajol. Se accede desde la carretera a Vallter 2000, a pocos kilómetros de Setcases. El ascenso es continuo y agradable por un sendero bien marcado, nada exigente a pesar de que se gana altura con bastante rapidez. En verano el ganado, vacuno o caballos, pasta en sus prados y es fácil ver sarrios o rebecos recorriendo las paredes o junto a los prados. Una vez en el collado es fácil y evidente dirigirse hacia el Coll de la Marrana para ascender, esta vez de manera más decidida, al Gra de Fajol. En días claros, como es el caso, se disfruta de unas vistas espectaculares a los valles y picos alrededor.
Infern, Freser, Bastiments y Coll de la Marrana desde Gra de Fajol
Es temprano y el imponente y piramidal Bastiments justo enfrente está a tiro. Se trata de bajar al Coll de la Marrana y ascender, otra vez de manera decidida, hacia la amplia cima. En 30 minutos desciendo de Gra de Fajol y alcanzo la cima de Bastiments. La zona está bastante solicitada. Las montañas por esta zona son amables en verano y es fácil coronar varias en una sola jornada.
Gra de Fajol Petit desde Gra de Fajol. A la derecha Coma de l'Orri
El descenso por el mismo camino lleva de nuevo al Coll de la Marrana, y de ahí se dirige al refugio de Vallter. Sólo es cuestión de seguir las marcas del GR para llegar al punto de partida. El camino conduce, junto al aparcamiento de la estación de esquí, a la escasamente interesante pista que discurre junto al todavía joven río Ter, carente de encanto por discurrir junto a las torres de alta tensión hasta el origen de la excursión.

Valle de Coma de Vaca y Balandrau al fondo.
Ruta sin dificultad que sólo requiere de la forma física necesaria para afrontar los 15 kms y casi 1500 mts de desnivel, técnicamente fácil y agradable de completar en verano. Para disfrutar de un día de montaña sin mayores dificultades ni exigencias, para disfrutar también con niños, en una zona del Pirineo bien comunicada y en la que nunca nos sentiremos solos.


sábado, 29 de agosto de 2015

Gorges du Tarn

Prades
Les Gorges du Tarn es un gran cañón de aproximadamente 53 kilómetros formado por el paso del río del mismo nombre en el sur de Francia, que forma parte del macizo central y de las montañas de Les Cévennes. Es una zona de media montaña que destaca por sus verticales paredes repletas de
farallones entre bosques, con curiosas formas geológicas y salpicada de encantadores pueblecitos que se asoman al río desde los verticales contrafuertes montañosos en los que se construyeron. Auténticos malabarismos tuvieron que hacer para levantar las casas y castillos en tan reducidos espacios al borde mismo de los acantilados.

Sainte Enimie es uno de los pueblos más importantes. Es una pequeña localidad, turística, que ya muestra sus encantos cuando se llega desde la carretera y que llama a ser fotografiada desde un mirador justo antes de llegar al pueblo. Siguiendo la carretera hacia Florac y tras cruzar Prades, otro precioso pueblo presidido por un imponente chateau, se llega a Castelbouc. El pueblo se encuentra enclavado a los pies de una roca con algunas casas colgadas sobre el río, otras protegidas bajo un vertical risco que alberga un castillo derruido. Siguiendo las marcas del PR se cruza el pueblo para, tras atravesar un barranco, empezar a caminar por un bucólico sendero junto al río. Éste transcurre en completa calma a nuestra derecha y es ideal para recorrerlo con niños.

El agua es transparente y la orografía forma numerosos meandros, pozas y playas de piedra que permiten bañarse continuamente en múltiples rincones. El agua es fresca, que no fría, y gracias a los baños que se pueden tomar el camino se hace agradable, invita a hacerse sin prisas, contemplativo. A ello contribuye también el paisaje; caminamos por un bosque de fresnos, encinas y pinos; enfrente tenemos la otra orilla con sus escarpadas montañas sobre el río y Prades como imagen fotogénica de típico pueblo del lugar. Una cueva, o balma, a medio camino nos hará pasar un buen rato trepando hasta su entrada, ayudando a los niños a alcanzarla y haciendo las fotografías para recordar el momento.

Antes de llegar a Sainte Enimie cruzamos un campamento de verano; ya estamos cerca. Cuando divisamos el pueblo el camino nos conduce a las primeras casas para cruzar el estrecho puente sobre el río que nos deja en medio de la medieval localidad. El paseo por sus calles es obligatorio. En el río la gente se baña y las canoas no paran de cruzar río abajo. Desde una roca algunos niños trepan para lanzarse a un chapuzón refrescante.

A la orilla del Tarn
Y por las calles los turistas toman fotos, el tráfico va y viene por la carretera y cada rincón ofrece una excusa para ser fotografiado. Tras la cerveza y los helados, y contratar una actividad de espeleo para el día siguiente, volvemos por el mismo camino. No perdemos ninguna oportunidad para seguir tomando unos baños refrescantes. Hace mucho calor en esta zona y el sol es exigente desde que aparece hasta que se esconde.
Las paredes que rodean al Tarn
Nos hemos alojado en el camping de Castelbouc, y en una semana prácticamente no hemos tocado el coche. La ruta de 19 kms en canoa que recorrimos un par de días después partió desde el mismo camping, y la cueva que visitamos con un guía de espeleología se encuentra en el mismo pueblo de Castelbouc. Sólo un día que amaneció lloviendo decidimos hacer una ruta en coche por Les Cevennes, patrimonio de la Unesco y realmente espectacular... pero esa ya es otra historia.

Castelbouc
Gracias a Ryan Adams por amenizar de fondo e inspirar este relato. Música ideal para rememorar espacios abiertos.
Castelbouc
Sainte-Enimie